El parque de Los Alcázares necesita atención para mejorar sus condiciones

Adelanto de unos de los artículos que aparece en el VECINOS de mañana lunes                

Las sucesivas remodelaciones no han solucionado sus problemas                                    El parque de Los Alcázares necesita atención para mejorar sus condiciones

Hay que atajar que en cada lluvia ocurra esto
Hay que atajar que en cada lluvia ocurra esto

Posiblemente el parque de Los Alcázares sea uno de los más frecuentados, si no el que más, y quizá también el mejor parque barrio, pero ha sufrido diversas remodelaciones sin que hasta ahora se haya dado con la obra final adecuada. Es verdad que tiene su conservación y mantenimiento cotidiano, como los demás, pero quizá esto no está siendo suficiente para que en algunos aspectos sufra retrocesos y deterioros evitables. Así, en la remodelación de la iluminación, que fue un gran avance, se destrozaron unos paseos que tenían una superficie más que aceptable y disponían de un compactado de zahorras con una superficie perfectamente adecuadas para facilitar el paseo o llevar sillas de ruedas para niños.          Vecinos                                                                                                                                   ¿Qué pasó? Al realizar los zanjeos de canalizaciones eléctricas estos en vez de reponerlos con la zahorra adecuada, se rellenaron con arena, de igual forma se procedió en el resto de superficie de los paseos, y desde entonces hay zonas con mucha dificultad y que realmente distan bastante de ser zonas aceptables de paseo.                                                                ¿Se pudo evitar? Por supuesto. La asociación lo puso en conocimiento del Ayuntamiento y se nos dijo que se subsanarían los errores cometidos, pero al final nada se hizo nada. Luego, se recepcionó la obra y llevamos dos años sufriendo las consecuencias.                              La consecuencia es que a la menor lluvia toda la arena se desplaza hacia el acerado de la parte baja o aparcamiento y se forman montones de arena, a la vez que el agua socava nuevas pequeñas torrenteras dejando espacios intransitables. Esto supone en cada lluvia de cierta intensidad que los empleados del mantenimiento del parque tengan que perder mucho tiempo retirando arena y abandonan las tareas cotidianas                                                   Después de dos años, con buena voluntad se ha tratado de resolver el problema poniendo en diferentes tramos de los paseos un bordillo transversal cada cierto espacio, pero esto se ha convertido en un obstáculo más, debido al inadecuado guijarro de relleno que dificulta el tránsito.                                                                                                                                  Como vemos los resultados no están siendo correctos y entre otras cosas por que el Ayuntamiento no puede dar por buena cualquier obra o recepcionar en cualquier condición. Esperamos que con la nueva corporación esto cambie.                                                         Las causas de todo esto podemos remontarlas al propio diseño de sus paseos para recoger el arrastre de tierra, para lo que se pusieron rejillas transversales, que se quitaban cuando llovía. Luego se sacaba la tierra, se esparcía por los paseos y hasta otra. En los laterales hay dos suaves canalillos cuyo objeto era recoger el agua de lluvia, aunque a día de hoy están varios centímetros por encima de toda la superficie de los paseos y han quedado inservibles. Cuando quitaron las rejillas de los canalillos para recoger tierra se las llevaron, éstos se cegaron de arena.                                                                                                      Por otro lado, hay padres y madres que solicitan la ampliación de las zonas infantiles y que éstas, en vez de arena, tengan zonas acolchadas.                                                          Asimismo, año tras año se han ido perdiendo árboles que no se han reemplazado. La parte baja desde Manuel Machado hasta Fresnedoso (también esto es parque) tiene un aspecto de abandono, y no quedan más que media docena de los de los más de 50 árboles que se plantaron con asistencia de Emiliano García-Paje.

Cuidemos el parque                                                                                                                 Lo más conveniente sería atajar las diferentes necesidades haciendo un estudio y una valoración técnica, con el objetivo de salvar el parque de los Alcázares. Aunque a nadie nos guste cambiar tierra por cemento, creemos que los dos paseos trasversales principales del parque a la vista de los resultados deberías solarse o poner impreso, como se hizo finalmente en el parque de Aquisgrán, que no tiene tanta inclinación como este.                     El espacio de la parte baja entre Manuel Machado y Fresnedoso, está definido en los proyectos financiados por el convenio Junta-Ayuntamiento, a falta de valoración de los técnicos municipales. Para la época de plantaciones se debería tener localizados los árboles que se perdieron y no han sido sustituidos, para realizar dicha operación.                                   No se trata de presentar el parque como caótico ni en estado critico, ni hacer altavoz de sus defectos, en ningún modo. Hay que tomar medidas que puedan acabar con los problemas actuales, que tienen solución antes que los defectos aumenten, y que a muy corto plazo mejorarían el parque y repercutirán en un ahorro constante de su mantenimiento.

 

 

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